Esta mascarilla capilar revitalizante es ideal para los cabellos secos y sin vida. La combinación de sus ingredientes aporta suavidad, nutrición y brillo.
Aprovechamos algunos de los aceites más valiosos utilizados en cosmética: argán, aguacate, jojoba y oliva.
El aceite de argán contiene un gran porcentaje de ácidos grasos insaturados, vitamina E y polifenoles. Por lo tanto, es una gran ayuda en la lucha contra los radicales libres, responsables del proceso de envejecimiento de nuestra piel. Gracias a la Vitamina E, nos ayuda a prevenir la deshidratación cutánea. El resultado del uso cosmético del aceite de argán es una piel más hidratada, menos arrugas y más elasticidad y flexibilidad, es decir, una piel rejuvenecida. Usado en uñas y cabello, el aceite de argán logra que sean más fuertes y resistentes, evitando la rotura, además, aporta un brillo inconfundible
El aceite de aguacate, al favorecer la generación de colágeno, mejora la estructura del pelo, restablece el cabello débil y frágil y le proporciona brillo y un aspecto saludable
El aceite de jojoba tiene la capacidad de disolver el sebum, una especie de cera que se deposita en los folículos pilosos y que es causante de la caspa y la seborrea del cabello, pelo partido, pelo excesivamente seco o graso, frente aceitosa, picazón y finalmente la "pérdida de cabello". En ese sentido, el aceite de jojoba penetra y disuelve los depósitos siendo importante para la regulación de la secreción sebácea excesiva de la piel y del cabello, estimulando así el crecimiento rico y abundante del cabello.
Los beneficios del aceite de oliva para el pelo seco, débil y maltratado, lo consagran como uno de los ingredientes básicos de mascarillas y recetas magistrales para el cabello
Además, esta mascarilla capilar puede ser complementada con ingredientes tan interesantes como proteína de arroz, proteína de seda o Provitamina B5.
Esta en concreto que os muestro, contiene Provitamina B5 y Vitamina E.
Y tiene un delicioso aroma a piruleta, para que el momento sea muuuuuuuuuy dulce.
¡¡Ah!! Y sin parabenos ni siliconas :)
La mascarilla la podéis usar de tres formas diferentes:
- Como mascarilla prelavado, sobre el cabello seco. La aplicáis sobre el cabello, recogéis el pelo y aguantáis con ella todo el tiempo que podáis hasta que lo lavéis (yo intento que sea entre una y dos horas)
- Se puede usar también como mascarilla postlavado, es decir, laváis el pelo, le quitáis un poco la humedad y la aplicáis. Aguantad con ella unos minutos, enjuagad y ya está. Esta opción es la mejor para cabellos muy muy muy secos, porque usada de esta forma es muy potente.
- Y luego está la tercera opción (que es la que más me gusta): usada como serum. Una vez lavado el pelo, lo secáis con una toalla y cogéis una cantidad pequeñita (como una avellana aproximadamente), lo extendéis sobre las manos y aplicáis de medios a puntas. Y sin enjuagar, secáis el pelo como lo haríais normalmente. De esta forma, conseguís quitar el encrespamiento, sacar ondas, dar brillo, proteger el cabello... Yo ya no puedo vivir sin ella, de verdad.
¡¡¡Espero que os guste a vosotros también!!!
Información obtenida de www.aceitedeargan.net, www.aceitedejojoba.com, www.aceitedeaguacate.org, www.innatia.com